41. Ven, Señor Jesús

Ven, Señor Jesús,
porque sin Ti ya no hay paisaje.
Ven Señor Jesús,
porque sin Ti no hay melodías.
Ven, Señor Jesús,
porque sin Ti no encuentro paz en nada.
Sin Ti, mis ojos no brillan.

La vida es poca cosa sin Ti,
sin Ti, sin Ti, sin Ti,
la vida es poca cosa.

Ven, Señor Jesús,
ven pronto a mi vida,
ven pronto, Señor,
ven pronto.


Porque sin Ti

yo no quiero la vida;
ya no canto con alma;
ya mis manos no sirven;
ya no escucho latidos;
ya no abrazo con fuerza;
mi corazón no se ensancha;
mi sonrisa no es plena.

Y todo sin Ti,
nada vale la pena.
Porque sin Ti ya no me llena nada;
porque sin Ti todo suena vacío;
sin Ti todo me deja tristeza.

Porque sin Ti yo no respiro hondo;
porque sin Ti todo me cansa;
porque sin Ti me falta todo
y me sobra todo,
todo sin Ti, sin Ti.
Ven, Señor Jesús,
ven pronto a mi vida,
ven pronto, Señor,
ven pronto.


Porque sin Ti

no me importa mi hermano;

no me importa el que sufre.

Porque sin Ti

mi corazón es de piedra

a quien todo resbala;

acostumbrada a los pobres;

acomodada en su casa;

sin jugarse la vida;

sin gastarla por nada,

sin gastarla por nada.


Ven, Señor Jesús,

ven pronto a mi vida,

ven pronto, Señor,

ven pronto.